Barra superior

Drop Down MenusCSS Drop Down MenuPure CSS Dropdown Menu

martes, 18 de marzo de 2014

La muerte de Squall (parte 5): Aliados y enemigos

Por si te has perdido algo, aquí tienes enlaces a las entregas anteriores de esta teoría.

Parte 1: Introducción
Parte 2: La herida
Parte 3: Rinoa
Parte 4: Te has convertido en tan sólo una memoria

Sociabilidad


Squall pasa de todos sus compañeros desde el mismo principio del juego, insiste en no formar parte de equipos y chirría cuando le meten en uno. De pronto, tras su desafortunado incidente, encaja perfectamente con todos, todos son amigos y se preocupa por todos. Por si esto fuera poco, le aceptan todos como líder, tanto de su pequeño grupo de combate, formado por los protagonistas del juego, como del mismísimo Jardín de Balamb superando incluso al propio director Cid Kramer en muchos aspectos del liderazgo.



Seifer


Rival pero compañero en el primer disco. Squall nunca muestra ninguna predisposición a matarle ni a luchar contra él a pesar de su rivalidad, una rivalidad bastante típica entre gallitos de clase pero que no suele acabar con la sangre llegando al río, o no demasiada al menos. Se ve obligado a enfrentarse a él debido a su alianza con la bruja, pero simplemente por estar en lados opuestos, nunca es nada personal.

A partir del segundo disco nunca más se cuestiona su status como enemigo ni hay dudas sobre la necesidad de luchar contra él y quitarle de en medio.


Brujas

Su misión principal como SeeD del Jardín de Balamb era matar a Edea (su madre), una tarea que sería horrible para cualquier persona. Repentinamente, surge otra misteriosa bruja que es la que en realidad manejaba todo lo malo del mundo ocurrido y por ocurrir, a la que poder matar sin ningún tipo de conflicto interno para el joven protagonista y que, de paso, exculpa a su madre de todo crimen que pudiera cometer. Todo muy oportuno y bien hilvanado, Mr Leonheart.


Leones

De pronto empiezan a surgir leones por todas partes. Como sabréis, los leones tienen cierta importancia para Squall.

Nada más despertar, en la prisión del desierto, nos encontramos con los Mumbas, estas alegres criaturas que se desviven por ayudar a Squall y que son, básicamente, leones. Menuda casual casualidad que le lleven justo a una prisión habitada por amistosos leones dispuestos a ayudar a escapar a un prisionero.

Gryphus es otro caso evidente de un león. Un Guardían de la Fuerza, ligado a Squall y que tiene forma de león. Más sobre el curioso caso de Gryphus más adelante, porque tiene chicha este asunto.

¿Cómo de pronto salen tantos leones si no es por una manifestación de su propio subconsciente? Tanto en el primer caso como algo positivo, como en el segundo caso como un enemigo a batir, su lado oscuro.




No hay comentarios:

Publicar un comentario